Si bien es cierto no todos los discos para ser buenos deben ser número uno, es más, hay un dicho muy bien dicho que por algo lo dicen: “Nadie es profeta en su propia tierra”. Este disco en particular tiene esa característica, llego a mí en mi primer año de universidad, era periodismo… ufff.... Que año 2003, cuando entre cervezas, vinos y amigos lo oí por primera vez, se trata del quinto album de estudio de la banda californiana Faith no More, King for a day… Fool for a Lifetime. Quienes a pesar de traer un recorrido bastante exitoso en la escena rockera alternativa de la costa oeste y del rock internacional en particular no fue bien recibido por la audiencia norteamericana ni europea, pero que si obtuvo números uno en Oceanía; en fin, eso da lo mismo, estamos en Chile y junto con el disco aquel año 1995 de su edición, los trajo a nuestro país con el festival Monster of Rock de la época, iniciándose así una estrecha relación de amor y amistad entre la banda y Mike Patton en especial y el publico chileno. (más allá de que lo hayan escupido aquel día)
